La trilogía de Guardianes de la Galaxia se ha convertido en una de las mejores dentro del Universo Cinematográfico de Marvel. Estas películas han dejado una huella imborrable en los fanáticos, y la tercera entrega no es la excepción. Bajo la dirección del gran James Gunn, esta película ha logrado mantener la esencia y el encanto de las anteriores, y ha cerrado la trilogía de una manera perfecta.
Lo que hace que Guardianes de la Galaxia Vol. 3 sea tan especial es la forma en que logra equilibrar la acción, la comedia y la emoción. La trama nos adentra una vez más en las aventuras de este grupo de inadaptados intergalácticos, pero lo que destaca especialmente es la historia paralela que explora el origen de Rocket Racoon. Esta historia de supervivencia es conmovedora y también se convierte en una fuerte y poderosa denuncia contra el maltrato animal. Es impresionante cómo una película de este género logra abordar temas tan profundos y conmovedores. Todo el arco argumental de Rocket es una maravilla de principio a fin hilvanando y cerrando muchas cosas del pasado.
Además de la trama principal, Guardianes de la Galaxia Vol. 3 cierra de manera satisfactoria las diferentes subtramas que se han desarrollado a lo largo de la trilogía. Todo está bien conectado y cada personaje tiene su momento para brillar y cerrar su arco narrativo de forma satisfactoria (A destacar Nebula y su gran evolución personal). James Gunn demuestra una vez más su habilidad para desarrollar grupos de personajes y hacer que sus dramas se entrelacen de manera interesante.
En un momento en el que algunas películas del Universo Cinematográfico de Marvel han dejado que desear, Guardianes de la Galaxia Vol. 3 se alza como una película destacada que nos devuelve la esperanza en las próximas fases. Esperamos ver más de lo que vendrá y deseamos suerte a James Gunn en su camino por DC y sus futuros proyectos.
*La Biblio*